Disfruto con las sesiones estratégicas de consultoría de marketing online. Cada sesión aprendo algo nuevo. En la consultoría de Marketing Online, los emprendedores y empresarios me cuentan su experiencia y analizamos todo el recorrido para recuperar el timón y crear una hoja de ruta estratégica que les permita conseguir sus objetivos. En el 85% de los casos, el problema de todos los emprendedores es el mismo. Y tú también lo tienes. Se trata de la actitud del emprendedor.

[bctt tweet=»Tienes el mismo problema que el 85% de los emprendedores. #RevolucionaTuNegocio»]

Los emprendedores acuden a mí con problemas como «necesito mejorar mi posicionamiento», «quiero atraer más clientes» o «cómo debo enfocar mi blog para vender más». Pero en la mayoría de los casos, el problema raíz es otro: si tienes un negocio, eres empresario. Y la mayoría de los emprendedores no se atreven a verlo.

Claves de la actitud del emprendedor

Como empresario debes… 

  • Pagar los gastos de mantener tu negocio
  • Tener una estrategia de precios definida
  • Diseñar una estrategia de venta
  • Marcar tus objetivos económicos

Y lo más importante de todo: tener la confianza en ti y sentirte capaz de llevar tu proyecto adelante.

La mayoría de los emprendedores han comenzado su andadura con pasión, pero siempre con una pizca de inseguridades y algunos miedos. ¿Y si no soy bueno? ¿Y si lo hago mal?
Permíteme decirte que estos miedos son normales. Los tenemos todos. Y sí, es muy probable que en alguna ocasión metas la mata en el proyecto de algún cliente. No olvides que eres un ser humano. ¿Quién no se equivoca nunca? 

Lo funtamental es que aprendas de los errores, que mires adelante con la confianza de decir: «Ya he aprendido algo nuevo». No importan los errores, ni los clientes que pierdas por el camino. Es vital tu actitud frente al arduo recorrido del emprendimiento.

[bctt tweet=»Lo importante no son los errores o los clientes perdidos. Lo fundamental es tu actitud como emprendedor. #RevolucionaTuNegocio»]

Sé de primera mano que no resulta nada fácil poner precio a tu tiempo. Y que seguramente te cuesta poner precio a esa labor que harías casi gratis. Pero tienes un negocio.

Define tu estrategia de precios

Ya llegará el momento de ofrecer precios más baratos o más caros según la estrategia o las circunstancias. Quizás sientas la necesidad irrefrenable de ayudar a una persona y le ofrezcas tus servicios casi gratis. Y eso es genial, pero no debe ser tu estrategia estándar.

Si trabajas con una estrategia de precios definida, te resultará mucho más fácil ser flexible. Además, de esta forma serás siempre consciente de los márgenes de beneficio con los que estás trabajando.

Recuerda que no solo pones precio a tu servicio. Defines un valor económico a tu tiempo, tu esfuerzo, conocimiento y experiencia. A ti te ha costado tiempo y dinero conseguir lo que eres ahora mismo.

Para definir esta estrategia de precios, te recomiendo que comiences a marcar tus objetivos económicos. Es uno de los errores del emprendedor: casi nadie piensa en lo que quiere o debe ganar para que su negocio prospere y pueda seguir adelante.

Marca tus objetivos económicos

Si marcas estos objetivos económicos, descubrirás cuánto debes vender cada mes. Y gracias a un seguimiento, podrás analizar qué mes ha sido mejor o peor. Incluso prever si un mes será bueno o malo. En muchas ocasiones nuestro negocio también es estacional: ya sea por la actividad en sí, o porque en verano, por ejemplo, la mayoría de las personas disfrutan de las vacaciones.

Dicho esto, para marcar estos objetivos económicos, deberás tener en cuenta los gastos que tienes mes a mes para mantener tu negocio con vida, y el sueldo que deseas ganar para ti.

Seguramente, deberás hacer un ejercicio de realismo los primeros meses de tu andadura empresarial, y tu salario sea muy bajo. Pero poco a poco, en función de los avances, podrás ir aumentando esa cifra hasta conseguir el objetivo deseado.

[bctt tweet=»Si esperas ganar 5 cifras los primeros meses de tu negocio, necesitas unos objetivos económicos realistas. #RevolucionaTuNegocio»]

Pero si no sabes cómo comenzaste, nunca podrás cuantificar el avance de tu negocio.

Diseña una estrategia de venta

Estoy convencida de que muchas veces ni siquiera te importa las horas que inviertes en tu negocio, aunque sean muchas más que cuando trabajabas para otra empresa. O te ves un sábado mirando tu correo para revisar tus tareas. Y tan feliz.

Si disfrutas con tu negocio, vas por el camino correcto, pero nunca olvides que debes vender tus servicios (si quieres pagar el alquiler todos los meses).

Cuando emprendemos un proyecto, generalmente nos gusta el área de operación. Sí, la parte en la que ejecutamos. Pero no nos apasiona tanto vendernos y ser comerciales de nosotros mismos.

[bctt tweet=»Como emprendedor, también debes venderte y ser comercial de ti mismo para conseguir clientes. #RevolucionaTuNegocio»]

Siento decirte que como empresario, es parte de tu trabajo.
Es indispensable para ti diseñar una estrategia de venta:

  • ¿Cómo captarás nuevos clientes?
  • ¿Qué canales utilizarás para ganar visibilidad?
  • ¿Cuál será el recorrido de los clientes potenciales?
  • ¿Cómo contactarás con tu audiencia?

Debes tener claro cómo vas a atraer clientes a tu negocio. Desarrolla un plan estratégico, lo más específico posible, y tendrás un protocolo de actuación y seguimiento de clientes que te permitirá conseguir clientes de forma constante y optimizando tu tiempo al máximo. Cuanto más concreto seas y más hipótesis plantees, más fácil te resultará en el futuro. Y podrás crear un sistema automatizado.

No permitas que nada se interponga en tu camino. Ni siquiera tú mismo. Eres perfectamente capaz de sacar adelante tu proyecto. Y no te preocupes, nadie (NADIE) nace sabiendo. Todos aprendemos a lo largo del camino.

Sobre todo, recuerda que cuando hablamos de negocios, nada es personal. Si pierdes un cliente, si pierdes suscriptores o seguidores, o si cometes un pequeño error: no es personal. Si un cliente potencial te dice que no está interesado, no te odia. Simplemente, no tiene un interés activo en tu servicio.

Sigue estas básicas para comenzar correctamente tu nuevo camino como emprendedor y entender tu proyecto como un negocio que te aporte beneficios económicos. Si te gusta ayudar, y además recibes un aporte económico, seguro que serás más feliz 😉

Y tú, ¿cómo vives el mundo del emprendimiento?

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